Visto los beneficios de practicar meditación y ver la asociación que hay entre el estrés y el antienvejecimiento.
Nos planteamos la siguiente pregunta: ¿Cómo empezar a practicar Mindfulness?
El concepto es simple, pero a veces no lo vemos fácil.
Para practicar mindfulness es necesario realizar una práctica de relax y dejar la mente en un estado de relajación.
Podemos empezar con ejercicios fáciles para empezar a practicar:
- Concéntrate en tu respiración. En todas las prácticas de relajación, la respiración es muy importante. Sé consciente de nuestro cuerpo y de todo cuanto nos rodea.
- Trata de jugar con la atención, déjala en blanco y luego focaliza algo concreto. Realiza este ejercicio para dispersar y concentrar tus pensamientos. Con la práctica, aprenderemos a centrarnos en el presente y no en los habituales pensamientos que nos llevan al pasado o se anticipan al futuro.
- Identifica tus emociones. Cuando te concentras, el pensamiento y las emociones trabajan en conjunto. Trata de sobrellevar esas emociones, observar cómo son y cómo nos hacen sentir. Pero no las intentes reprimir ni eliminar.
- Visualiza el momento en el que vivimos y no te dejes influenciar por las emociones o sensaciones. Podemos caer en el error de dejarnos llevar por aquello que sentimos y no centrarnos en el momento presente.
- Toma consciencia de tu cuerpo. Frecuentemente nuestras emociones se esconden en forma de sensaciones corporales. Depende de la persona los nervios se pueden manifestar de muchas maneras diferentes, problemas digestivos, musculares, de la piel, etc. Cuando practiques mindfulness, presta atención a tu cuerpo y se consciente de sus sensaciones.
Recuerda: Adopta una postura comoda de meditacion, no debe haber tensiones, ni molestias, ya sea sentada o acostada con las rodillas flexionadas.
El Mindfulness es nuestro gran aliado para el antienvejecimiento de los telómeros.